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Tírate a la Filosofía

Publicado el septiembre 3rd, 2014 | por InOutRadio

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Tírate a la Filosofía: 'Salidas a la incertidumbre' con Carrie Romero y Critti Ciruelos

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–Como prometimos la semana anterior, vamos a empezar esta andadura con un filósofo griego: Epicuro

–¿POR QUÉ CON ÉL?

–Por varias razones

–Primero nos parece absolutamente vigente, moderno, que sus propuestas nos pueden ayudar a vivir mejor ahora, que es lo que nos interesa

–Él entiende al filósofo como un médico para el alma no como un curioso erudito, teórico y científico, estilo Platón o Aristóteles

–Y es lo que buscamos nosotras

–Quizás lo que necesitamos

–Sin duda, necesitamos medicinas para el alma

–Como Mafalda

–Cuando él aparece, la situación de Atenas y de sus ciudadanos (y aquí no podemos hablar de ciudadanas porque todas sabemos que las mujeres y los esclavos no eran considerados ciudadanos en la polis griega) , era muy similar a nuestra realidad, a nuestro aquí y ahora

–Y él hace una propuesta

–Revolucionaria, pensamos nosotras

–¿POR QUÉ REVOLUCIONARIA?

–Porque, entre otras cosas, dice que la felicidad es el estado natural del hombre (en este caso, en masculino genérico) es decir, del hombre y de la mujer. Tú te imaginas decir eso. ¡Si es revolucionario decirlo ahora! Afirmación, que por otro lado, a mí me crea dudas

–Dice en la Carta a Meneceo: “Ni por ser joven demore uno interesarse por la verdad ni por empezar a envejecer deje de interesarse por la verdad. Pues no hay nadie que no haya alcanzado ni a quien se le haya pasado el momento para la salud del alma”Luego también hay razones sentimentales. Por ejemplo, Epicuro empezó a enseñar filosofía en Mitilene, ciudad de la isla de Lesbos, y para nosotras, es un espacio mítico

–Con lo bueno y lo malo de los espacios míticos

–Claro. Pero en este caso nos sirve para recordar a Safo

–A quien adoramos, por supuesto, y recito en catalán: “No he vist mai una noia / més desdenyosa, oh Irana, que tu”

–Tiene más propuestas que nosotras consideramos revolucionarias. Por ejemplo, decir que el placer es un bien connatural al ser humano, que es el Bien supremo

–O cómo entiende la amistad

–Pues de estos temas es de los que nos gustaría tratar los próximos programas. Hoy querríamos hacer una pequeña introducción para ver su modernidad, para traérnoslo a nuestra realidad  y después, centrarnos un día en sus ideas sobre el Placer y  otro día, sobre lo que piensa de la Amistad. Es decir, vamos a dedicarle 3 programas.

–¿QUÉ TIENE QUE VER EPICURO CON LA ACTUALIDAD, UN HOMBRE QUE VIVIÓ en EL S. III  a.C con Octubre del 2012?

–Ok Satchi. Dime una palabra que crees que define la situación actual, el sentimiento de cualquier persona ahora mismo

–INCERTIDUMBRE

–Muy bien. Vamos al diccionario

–Siempre hay que buscar el significado exacto de las palabras

–Es muy importante ser exacta. Cuando se nos pasa el significado de las palabras, porque claro está que se nos pasa, hay que ir al diccionario.

–Hay que, como se dice en catalán “fiilar prim”. ¿Cómo se dice eso en castellano? ¿Hilar fino? Ay…que expresión tan bonita…pero ¡No sé si es una catalanada!

–Nosotras en general empezamos buscando las palabras en “el María Moliner”, porque admiramos su tenacidad, porque hizo una revisión a fondo de las definiciones tradicionales, desmontó las de la Academia y las volvió a redactar en castellano del siglo XX y porque preferimos un diccionario de uso, una guía y herramienta del idioma al normativo de la Academia. Utilitarias. En el sentido de Epicuro.

–Busquemos “incierto”: 1. no cierto o verdaderamente falso. Dudoso. Inseguro. Problemático. Se dice de lo que no se sabe o no se puede afirmar con certeza. 2. Contingente. Eventual. Inseguro. Se aplica a lo que puede ocurrir o no.  3. Impreciso o borroso: “de perfiles inciertos”.

–Es decir, un estado que define perfectamente a los seres humanos que somos ahora nosotras

–¿QUÉ SIGNIFICA SER UTILITARIAS AL ESTILO DE EPICURO?

–Esa es una de las cosas que destaca Epicuro: la función utilitaria de, en este caso, filosofar. Pero también de la Amistad y del Placer. Si las ideas no sirven para ser felices, no sirven. Es un médico no un moralista. Dice Epicuro: “VANA ES LA PALABRA DE AQUEL FILÓSOFO QUE NO REMEDIA NINGUNA DOLENCIA DEL HOMBRE”(genérico)

–Pero volvamos a la INCERTIDUMBRE porque su sentido de lo utilitario está relacionado con eso

–Epicuro vive en una sociedad perturbada por la angustia, el temor y la servidumbre…como nosotras…

–Angustia por si cobraré o no mañana, por si encontraré una pareja, por si tendré dinero para pagar el dentista, por si entenderé algún día qué significa la “prima de riesgo”

–Temor a perder el trabajo, a no encontrar uno si no tengo, a morirme, a que se mueran las personas que quiero, a no poder ir al médico porque no puedo pagarme un seguro Privado, a no poder estudiar, a la vejez,

–y servidumbre

–Volvemos a la maravilla de Blade Runner. Harrison Ford está colgado de una viga en la azotea de un edifico. Cae la lluvia, como todo el rato en esa película y el Replicante, de pie, enfocado desde arriba, le dice : “es toda una experiencia vivir con miedo, ¿verdad?. Eso es lo que significa ser esclavo”

–Epicuro en una película de 1982

–La solución utilitaria que él propone es razonar y actuar para liberarnos de lo que él considera una enfermedad colectiva

–El miedo

–¿POR QUÉ LA SOCIEDAD DE EPICURO SE PARECE A LA NUESTRA?

–Algo semejante a lo que vivimos ahora, aunque hablaremos de la polis cuando hablemos de H. Arendt. Los atenienses, al perder Atenas pasaron de ser ciudadanos libres que participaban en la creación  de su ciudad a depender de la voluntad de un rey, se convirtieron en otra cosa, en personas solas, individuales, desarraigadas, pertenecientes a un Imperio, pero lejanas a su ciudad

–Ya no tienen posibilidad de participar en la construcción de su mundo político, social y cultural. Todo es demasiado grande, demasiado alejado de cada uno

–La política es entonces un asunto de Estado. No una cosa que practican cada día los ciudadanos a través de la palabra en el ágora y de la acción, interviniendo en la sociedad

–Todo es demasiado grande

–Y sienten, como yo siento, que no puedo cambiar nada. Como cuando dices que vas a una manifestación y muchas personas van pero sienten que no sirve de nada

–Entonces, nuestro destino ya no está en nuestras manos sino en las del monarca (es decir, Mas, Mariano, Merkel…el trio M) y tu participación han decidido que se limite a una visita a las urnas cada 4 años

–Además, como la adquisición de la ciudadanía pasó a depender de tener más de 2000 dracmas, aumentó la lucha de clases y desapareció la solidaridad entre los miembros de la comunidad. Esto mismo es lo que pasará si la señora Cospedal se sale con la suya y no paga a los parlamentarios de Castilla la Mancha. La democracia desaparecerá porque a la política se dedicarán los que tengan dinero y no tengan que ir a trabajar y ellos defenderán sus propios intereses, sus privilegios.

–Desaparecen los vínculos cívicos

–Aumenta la sensación de inseguridad

–Crece el individualismo

–Que es donde nosotras habitamos: en el individualismo

–Entonces, con los seres humanos miedosos del futuro (como ahora), sintiendo que nada depende de ellos (como ahora)… RESPONSABILIDAD!!

–Ahí aparece la filosofía de Epicuro. Una filosofía para el individuo. Él ya no puede hablar a la colectividad. Porque no cree en ella,   ya no existe

–Y aparecen diferentes propuestas, todas ellas dirigidas al individuo, soluciones para cada uno ante una sociedad hostil. Son escuelas éticas preocupadas por el individuo que ha sido arrancado de su mundo, de la polis, y debe darle un nuevo sentido a su existencia cotidiana, debe buscar la felicidad.

- La desaparición de lo público es preocupante y terrible. Y ahora estamos viviendo eso. El problema del individualismo es que nos lleva al “sálvese quien pueda”, a la ley de la selva  y la historia nos ha enseñado quienes se salvan. Yo soy absolutamente defensora de las cosas de la comunidad, de lo público.

–Pero ya no sólo eso, es que han conseguido que si alguien te habla en la calle, en vez de escucharle pienses: me quiere robar.

- Desconfiamos.

- No nos miramos a la cara, no nos saludamos con los vecinos, que no vean lo que tengo, lo que soy…quieren que estemos solos y solas, para que seamos más débiles, más vulnerables.

–VOLVAMOS A LAS PROPUESTAS A ESA INCERTIDUMBRE

–Vamos a hablar de tres propuestas. Por ejemplo, hay días que me levanto ESTOICA  (que es una de las escuelas que nacieron paralelas a Epicuro-) y digo, “lo dejo todo” me largo a mi pueblo, Alcolea del Pinar, en la sierra me largo sola, y pongo una panadería. Pagaré mis impuestos

–Eso sí lo tenéis las estoicas, manejáis dinero

–Sí. Y viviré sin inmutarme ante lo que no controle, ante lo que no dependa de mí: ni la salud, ni el dinero, ni la muerte

–Resignación

–Los astros sabrán lo que hacen

–Determinismo se llama eso. Es una posición donde está una parte de la gente ahora. Por ejemplo yo hay días, los días estoicos, que creo en los astros y en que todo está escrito…

…y respetaré al gobierno y “que me dejen en paz como yo los dejo a ellos y a ellas”. Mis libros. Mis paseos al atardecer. La poca gente que tendré alrededor. Mi comida frugal.

–De esta postura a mí, me interesa la reinserción en la naturaleza pero no me gusta el determinismo, ya que creen que quien se rebela contra el destino es necio y que rebelarse es solo una causa de dolor y sufrimiento

–Los estoicos triunfaron ideológicamente en Roma y al cristianismo le gustó eso de la resignación, del determinismo.

–No hay que dejarles hacer. Creemos que tenemos que participar en construir el mundo en el que vivimos. Aunque nos canse

–Aunque nos duela a veces, ya que la mayoría de veces es el lugar donde nos sentimos felices y personas

–Opción estoicismo, descartada

–Descartada

–¿QUE MÁS OPCIONES HABÍA?

–El cinismo

–Estos son muy interesantes porque ponen patas arriba todo, se consideran miembros de una comunidad universal que no conoce fronteras ni leyes particulares

–No aceptan ningún tipo de coerción de la comunidad sobre el individuo, lo que los lleva al individualismo extremo

–Rompen con las normas de convivencia

Se consideran ciudadanos del mundo, apátridas, son vagabundos, el mundo les pertenece y solo siguen sus propias  leyes

–Como los románticos y como los modernistas de principios de siglo, que pretenden “Épater le bourgeois”, asustarlo, escandalizarlo, romper con las reglas de una sociedad que castra al individuo

– Demasiado individualistas para mí. Yo necesito compartir. Es el sentido que le encuentro a lo que hago, siento y pienso.

Demasiado primitivos. Ellos no creen en la comunidad y yo tengo esperanzas…

–Y la tercera opción es la que  nos gusta más: Epicuro: nuestro médico. El médico que  hemos encontrado para el alma. En época de indigencia, de desamparo político y naufragio humano, Epicuro nos dice que la filosofía es un fármaco cuya única finalidad es la adquisición de  la felicidad

–La libertad feliz que busca Epicuro sí es molesta, ejercida desde la tranquilidad puede ser revolucionaria. Por eso no le gustó a la Iglesia

–Epicuro propone un término medio, a mi entender, respecto a, por ejemplo, la relación del individuo con la sociedad

–Desconfiamos de la sociedad, vale, nos apartamos, es una fábrica de opiniones vanas que conlleva la sumisión a valores que consideramos falsos

–Ok, no colaboramos, renunciamos al quehacer político institucionalizado…pero él funda su escuela, el jardín,(del que hablaremos cuando hablemos de lo que para él significa la amistad) en realidad un huerto donde viven retirados un grupo de amigos y amigas dedicados a cultivar verduras y a pensar y a gozar de la amistad y de la vida, sensibles, nada trágicos.  Para mí, funda una pequeña polis, eso es una propuesta política

–En el jardín, además, participaban hombres y mujeres, ciudadanos libres y esclavos, todos fueron aceptados

–Rechaza la educación tradicional, la Paideia, porque cree que transmite unos valores culturales basados en la competición continua, en ser el/ la “mejor” en lugar de “ser bueno/a”.

–¡Haz un master!

–Especialízate cuanto antes para ser la mejor en lo tuyo, aunque no tengas ni idea de quién descubrió la penicilina

–Sé primera de promoción

–Si ya lo tienes, ¡haz otro Master!

–¿Quién es Mondrian?

–¿de qué me hablas?

–Estar en contra de la Paideia, de la tradición cultural, no significa no estudiar ¡eh! El conocimiento apacigua el espíritu ya que es el que nos despeja las sombras de la superstición y la ignorancia.

–Bases del miedo

–Exacto. Por eso, ante el miedo, hay que estudiar, aprender, saber, observar, pensar, razonar

–Antes tuvieron que hacerlo ante el miedo a los dioses. Ahora nosotras debemos hacerlo ante nuestros miedos. Los  actuales. Perder el trabajo, la prima de riesgo, el rescate, la imposibilidad de comunicarme con quien tengo delante, etc. ¿qué hay de verdad en eso y qué hay de mentira para que sigamos esclavas del miedo?

–¿quién gana con nuestros miedos? ¿Quién nos los infunde? ¿De dónde vienen?

La seguridad que tanto buscamos, nos dice Epicuro, está en el retiro de la vida pública, lejos de las opiniones ajenas, ahí, en un huerto, rodeada de mis semejantes donde caben muchos y muchas, disfrutando de la vida, gozando de los placeres discretamente, siendo autosuficiente junto a mi comunidad. Una felicidad serena.

Dice una de las Máximas Capitales: “la solución más sencilla para lograr la seguridad frente a los hombres que hasta cierto punto depende de una capacidad eliminatoria, es la seguridad que proporciona la tranquilidad y aislamiento del mundo”

–Vamos, una comuna de los 70

–Por ahí va, con grandes matices depende de la comuna de la que hables. Hay una lectura de los placeres de Epicuro muy alejada de lo que él entendía por placer

–Yo me moriría. No podría estar simplemente en el huerto, tendría que salir, ver mundo, moverme.

–Seríass libre de hacer lo que quisieras. Además, me temo que será lo que deberemos hacer cuando seamos viejas, queramos o no, porque no tendremos pensión y no podremos pagar el alquiler de un piso solas…a no ser que tengas uno de propiedad o estés haciéndote un plan de pensiones con el que se te multiplica el dinero sin saber cómo…sin querer saber cómo…

–Piso compartido a los 67

–Yo quiero fundarla antes, por creencia, no por necesidad. Ando buscando “amigas” y casa con jardín…

–¿Y QUÉ ESCRIBIÓ ESTE SEÑOR?

–Escribió mucho. Lo que nos ha llegado ha sido vía otros autores, fundamentalmente de Diogenes Laercio y nos han llegado textos muy breves, compilaciones que él mismo hizo para quien no tuviera el tiempo o la capacidad de entender los grandes tratados. Las obras completas de Epicuro son menos de 100 páginas. Están editadas en Cátedra por José Vara y hay un libro de Carlos García Gual en Alianza que además de incluir algunos de los textos sitúa a Epicuro y su pensamiento de una forma clara y sencilla.

–Tenemos tres cartas: Carta a Meneceo, Carta a Pítocles, Carta a Heródoto. Las Máximas Capitales que son 40 máximas breves, concisas, como un manual de urgencia y las Sentencias Vaticanas, que se encontraron en el Vaticano y con una de las cuales queremos acabar hoy el programa.

“Nacemos una sola vez y dos no nos es dado nacer y es preciso que la eternidad no nos acompañe ya. Pero tú, que no eres dueño del día de mañana, retrasas tu felicidad y, mientras tanto, la vida se va perdiendo lentamente por ese retraso, y todos y cada uno de nosotros, aunque por nuestras ocupaciones no tengamos tiempo para ello, moriremos”

–¡Blade runner total!

 

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Acerca de la autora

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