Artisteando: Literatura lésbica que pedimos a las Reinas Magas de Oriente.
Si, os habéis portado bien, seguro que las Reinas Magas de Oriente, van a ser muy generosas con vosotras!!!! Y os traerán libros. Helle desde Cómplices Librería, nos recomienda unos cuantos libros.
La superestrella de la música, Noelle Laurent, se niega a grabar la música que sus productores han preparado para su nuevo disco. Incluso está dispuesta a romper su contrato, si es necesario, porque lo único que quiere es una oportunidad de cantar sus propias canciones. Desesperados, los productores acuden a la presidenta de la discográfica, la tiburona empresarial Helena Forsythe, famosa por no dejar títere con cabeza. Noelle está convencida de que la presidenta será la bruja que todos esperan, pero no está preparada para que su formidable presencia y carisma la afecten tanto.
Para Helena, el dinero es lo único que importa, así que ¿por qué cambiar un estilo que funciona? Sin embargo, cuando Noelle demuestra una fortaleza y coraje inesperados durante las negociaciones, Helena entiende que tiene que cambiar su estilo habitual de apisonadora si pretende convencerla. Echando mano del encanto en lugar de la fuerza bruta, los inesperados sentimientos que le despierta Noelle la cogen por sorpresa. Cuando Noelle responde con la misma moneda, las dos mujeres suben las apuestas y no solo ponen en juego su futuro profesional, sino que también arriesgan sus corazones.
Segundo libro de Gun Brooke traducido al castellano, después de su exitos novela Café Sonata.
Cruce de Pistas: Rachel Sprangler
Cualquier esquiador sabe que todo puede pasar en un cruce de pistas. Tras un amargo ultimátum de su amante, Campbell regresa al hogar de su infancia, la estación de esquí Bear Run, en busca del apoyo y solaz incondicional de su familia. Parker Riley escapa a la montaña cuando el mundo de la poderosa maquinaria política de Chicago le hace cuestionarse su buen juicio, tanto en la vida como en el amor. Pese a la reticencia inicial, las dos mujeres ven cómo su amistad en ciernes se precipita hacia el romance, como una imparable bola de nieve. La idílica estación de montaña es el escenario perfecto para que aprendan a confiar de nuevo y, quizá, encuentren su segunda oportunidad en el amor. Sin embargo, cuando el pasado de Parker resurge, Campbell se ve obligada a enfrentarse a sus propias y duras verdades. Heridas recientes se abren de nuevo y los obstáculos inesperados en el camino amenazan cualquier esperanza de tener un futuro juntas.
¿Qué harías si una mujer irresistible pero absolutamente intocable te murmurara ‘si me quieres, tendrás que venir a buscarme’? Ese es el dilema al que se enfrenta Elliott Foster, directora general de Foster McKenzie, cuando conoce a la atractiva Lauren Collier, principal asesora legal de una empresa catalogada en Fortune 500. A Elliott no le faltan mujeres atractivas dispuestar a comportir la cama con ella, y no le importa si es su dinero o ella misma lo que las atrae. Según sus reglas, no hay motivo para que dos mujeres que sienten el mismo interés por el placer no pasen la noche juntas… Considerada ya la heredera de Karin Kallmaker, pero con más pasión!
Cuando un fraude de fondos de alto riesgo deriva en asesinato, una mujer teme por su vida mientras otra arriesga su corazón para protegerla. Leigh Grove es una joven con muy buenas perspectivas profesionales que trabaja en una importante empresa de inversiones. Cuando descubre que algo no funciona, su perfecta vida empieza a desmoronarse. Conn Stryker dirige una empresa de software forense y ha organizado su vida igual que sus proyectos de software: control absoluto y ninguna sorpresa. Pero hay primeros impulsos que no obedecen razones predeterminadas.
Liderar el equipo de guionistas de una cadena de televisión lesbiana (Lesbian TV) de nueva creación parece un sueño hecho realidad para la generosa y trabajadora C.J. Jansen. La pena es que la cadena está dirigida por la examante de C.J., Debbe Lee, apodada la Dama Dragón: una mujer que usaría la bandera arcoiris para estrangular a alguien, sin despeinarse siquiera, por haber tenido una idea creativa desafortunada. Además de tener las máquinas expendedoras cargadas de antiácidos (para los días malos) y de cuchillas de afeitar (para los días muy malos), C.J. no da abasto tratando de impedir que su equipo se acueste con las estrellas y, al mismo tiempo, intentando encontrar una programación demoledora que mantenga a los telespectadores pegados a la pantalla, y a Debb lejos de ellas. Lo último que la agotada C.J. necesita es un romance. Aún así, quizás viva uno… Al tiempo que la historia despega, la cadena asciende imparable hacia una lluvia de premios y galardones. “Son sus besos” demuestra que en la vida, el amor y la televisión ¡los mejores momentos nunca siguen el guión!


